Noia es una pequeña villa que merece un paseo y pararse a picar algo. En particular destacaríamos dos iglesias: Santa María A Nova, hoy museo, con un cementerio a destacar. En su interior podréis apreciar una de las colecciones de lápidas de mayor número de toda Europa datadas entre el los siglos XIV y XVII. La otra iglesia-fortaleza es la de San Martín del siglo XV.
Desde Noia tomamos rumbo a Muros. Villa marinera con un pequeño casco urbano muy acogedor. Es un buen lugar para disfurtar de la gastronomía gallega.
Desde Muros seguiremos dirección a la villa de Carnota. En todo el recorrido hay hermosas playas. Al lado del monte Louro está la playa de Ancoradoiro de gran belleza.
Antes de llegar a Carnota nos detendremos en la aldea de Lira para admirar uno de los dos hórreos más grandes de Galicia ya que se disputa el honor con el hórreo cercano de Carnota. Ambos se merecen la visita.
Carnota es una villa marinera que en sus cercanías camino de corcubión y Cee tiene muchas cosas que ver. Nos atrevemos a sugerir algunas de ellas:
- En carnota mismo su hórreo, su iglesia parroquial y el entorno del puerto y la playa.
- Subir al monte Pindo desde donde se tienen unas vistas muy hermosas.
- Al pie del monte Pindo desemboca el río Xallas formando la hermosa cascada o Fervenza do Ézaro. Una cascada particular ya que cae en la misma desembocadura al mar.
El regreso a casa lo haríamos por el interior por la AC-441 que pasando por Santa Comba nos llevará a Santiago donde ya podremos tomar la AP-9 para regresar a casa. Son unos 100 Km que nos llevarán cerca de hora y media.
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